Babcock & Wilcox
Mejora.- 1972
1. Aspectos institucionales.
La empresa que analizamos en esta ocasión se
constituyó en Bilbao en el año 1918 para construir con arreglo a las patentes,
estudios y demás elementos técnicos que la casa matriz Babcock & Wilcox,
Limited, emplee para sus construcciones análogas diversos productos
siderúrgicos en España.
En su capital social, la participación de la
Babcock inglesa, a pesar de ser mayoritaria, no es muy elevada, pues no alcanza
siquiera el 10 por 100. Existen otros socios importantes por sus
participaciones relativas, pero ninguno llega a alcanzar la correspondiente a
Babcock.
Sus factorías se hallan emplazadas en la
Vega de Galindo, términos municipales de Sestao y san Salvador del Valle, con
terrenos en Orduña y San Pedro de Galdames, localidad esta última en la que
posee minas que abastecen de mineral de hierro a sus producciones siderúrgicas.
Es propietaria de una central térmica para generar energía eléctrica para su
propio uso, así como un ferrocarril de 23 kilómetros de longitud que enlaza la
dársena de Portugalete con las minas citadas, así como una red interior sus
factorías de Galindo.
Sus producciones son amplísimas, abarcando
una gama de, al menos, cincuenta productos diferentes. Estos se agrupan en dos
fábricas: una de productos tubulares y otra de bienes de equipo. La primera de
ellas tiene dos divisiones, una siderúrgica y otra de tubos y botellas. La
primera de ellas incluiría producciones de acería, fundición, forja y
laminación, mientras que la segunda incluiría la fabricación de tubos con o sin
soldaduras, así como la de botellones para gases. Con relación a la fábrica de
bienes de equipo incluye dos grandes producciones: por otra parte,
mecanización, engranajes, motores, locomotoras, maquinaria pesada y válvulas;
mientras que por otra, abarcaría la fabricación de calderas y de estructuras.
Ya hemos señalado que la empresa se abastece
de mineral en sus propias minas, al mismo tiempo que el taller de acería
proporciona el acero a los otros talleres de la empresa, obteniendo de esta
forma un suministro seguro y a menor coste.
La empresa cuenta con asistencia técnica no
sólo del grupo Babcock, sino que también tiene concertados diversos convenios
de licencia y asistencia técnica con otras empresas extranjeras.
Dentro de sus filiales destacan tubos
Reunidos y Tubos del Nervión, empresas ambas en la que participa al 50 por 100
en su capital conjuntamente con Tubos Forjados. La primera, que comenzó a
producir en 1969, fue creada, dentro de la colaboración mencionada, mediante el
traspaso de parte de los activos de Babcock, incluyéndose casi 600
trabajadores. El 50 por 100 del capital de Tubos del Nervión fue cedido por
Tubos Forjados simultáneamente a la operación anterior. Otras participaciones
incluyen Helisold, para la fabricación de tubos de gran diámetro soldados en
hélice, la Babcock portuguesa, por intermedio de la cual participa en las
empresas Babcock de Angola y de Mozanbique, etc.
Todo lo anterior sirve para poner de manifiesto
cómo nos enfrentamos con una empresa de grandes dimensiones, al menos a nivel
nacional, preparada desde el punto de vista técnico, por sus conexiones con
empresas extranjeras de tecnología avanzada, pero inserta en un sector
altamente problemático y con un futuro no demasiado claro, no solamente a nivel
nacional sino mundial. Podrá parecer una paradoja el hecho de que precisamente
uno de los sectores que pueden considerarse básicos en toda estructura
económica deba enfrentarse con una serie de problemas que comprometen
seriamente su rentabilidad, pero la empresa que analizamos es una prueba clara
de esta situación. Los Excedente a nivel mundial, el encarecimiento de los
costes, el problema de los precios, la práctica del dumping, su vinculación a las
oscilaciones de la coyuntura, etc., son los problemas básicos que gravitan
sobre el sector.
En el caso español, en los últimos años la
evolución ha sido muy favorable al conjuntarse diversos factores, entre los
cuales la reestructuración empresarial vinculada a los planes de acción
concertada ha sido uno de los más importantes. De cara al futuro, el tratado
comercial con el Mercado Común puede suponer una ayuda a la exportación, dado
su trato favorable a los productos siderúrgicos. En cualquier caso, las
empresas del sector deberán seguir enfrentándose con importantes problemas si
quieren mantenerse por sí mismas, sin recurrir a la ayuda pública en un mercado
con un alto grado de competencia y en el que la búsqueda de nuevos mercados se
hace en condiciones francamente difíciles.
En el cuadro numero 1 hemos recogido la
evolución de las magnitudes fundamentales para definir la política productiva y
comercial de Babcock. Su expansión, fundamentalmente a partir de 1968 ha sido
importante, a pesar de la mala situación coyuntural de los años 1968 y 1970.
Como reflejo de esta expansión puede aducirse el hecho, reflejado en el cuadro
citado, de que la facturación tanto por hombre-año como por pesetas de
inversión neta industrial no ha dejado de crecer.
2.
Magnitudes Fundamentales.
Si tuviéramos que escoger una palabra para
calificar la evolución de magnitudes fundamentales de Babcock, que recoge el
cuadro número 2, ésta sería la de estancamiento. En efecto, en el periodo
analizado la sociedad no ha realizado ninguna ampliación de capital, las
reservas se mantienen prácticamente inamovibles, y como consecuencia, los
recursos propios siguen un comportamiento análogo. Solamente se observa un
incremento, si bien hay que decir que relativamente moderado, en el exigible,
lo que permite que los recursos totales de la empresa hayan aumentado
ligeramente en el periodo que abarca nuestro análisis.
Descendiendo a un
nivel de mayor profundidad, la composición de las diferentes partidas de la
estructura financiera de la empresa muestran ciertas particularidades que es
necesario destacar. Dentro de los recursos propios, las reservas suponen
prácticamente el doble del capital; este extremo se explica en gran medida por
el hecho de que la sociedad no haya ampliado su capital desde abril de 1951.
Creemos que es la primera empresa de cuantas hemos analizado en esta sección
que ha permanecido un periodo tan dilatado de tiempo sin realizar ninguna
ampliación de capital. En este sentido hay que tener en cuenta que, aunque a
priori ese extremo pudiera obedecer a un deseo implícito por parte de los
responsables de la empresa de mantener la autofinanciación al máximo sin
recurrir al mercado de capitales, han sido en cierta forma las dificultades que
han atravesado la empresa en los últimos años y como es lógico han tenido su
consiguiente reflejo en la Bolsa, los que, en cierto modo, han cerrado esta
posible vía de financiación. En efecto, para que una empresa se comprometa a
ampliar su capital social tiene que tener las suficientes expectativas de
rentabilidad que le permita remunerar el nuevo capital captado y éste no parece
haber sido el caso de la empresa que analizamos, al menos en los primeros años
de periodo considerado.
Tampoco debe, en
este sentido, darse una interpretación desorbitada a la importancia de las
reservas con respecto a capital dentro de los recursos propios de la sociedad.
Prescindiendo de consideraciones sobre el mucho o escaso significado económico
que pudiera tener la diferenciación entre reservas y capital que nos llevaría a
plantear el problema a unos niveles que no corresponden a este breve análisis,
en la composición de las reservas ocupa una posición preponderante el fondo de
regularización y las reservas por prima de emisiones de acciones. Es
interesante consignar que el fondo de regularización supera el 50 por 100 del
capital de la entidad; este porcentaje tan elevado tiene su origen en la propia
actividad de la empresa que necesita de un inmovilizado considerable y, por
otra parte, en la consideración que antes mencionábamos de que la sociedad no
ha realizado ampliaciones de capital en los últimos años.
Como comentábamos al
iniciar el presente apartado, el exigible ha registrado un cierto incremento,
aunque es mayor en el caso del endeudamiento a corto plazo, no puede decirse
que las diferencias sean significativas, constituyendo un objetivo expreso de
la empresa en los últimos ejercicios el ir sustituyendo recursos de origen
bancario por otros de mayores vencimientos. En este sentido han ocupado un
lugar de primer orden dentro de la financiación de la empresa los créditos de
acción concertada. Dicho crédito ofrece beneficios de orden fiscal, arancelario
y de expropiación forzosa y supone el poder financiar con crédito oficial el 70
por 100 del valor del programa de inversiones, con un interés del 6,5 por 100
al mismo tiempo que se otorga libertad en la política de amortizaciones. A
cambio de ello, la empresa se compromete a aceptar el programa siderúrgico
nacional, así como a facilitar información técnica, financiera y económica a la
Administración. Aunque dicho crédito se ofrece en condiciones bastante
ventajosas en relación a las alternativas que ofrece el mercado, la baja
rentabilidad que ha caracterizado a la sociedad en los primeros años del
periodo que abarca el análisis, ha hecho que la remuneración de 6,5 por 100
resulte relativamente elevada.
Así como la sociedad
no ha captado recursos el mercado en los últimos años por via capital, sí lo ha
hecho a través de emisiones de obligaciones, suponiendo dicha partida la más
importante de cuantas integran el exigible a largo plazo. En ese sentido, en
abril de 1971 realizó una emisión de obligaciones parcialmente convertibles por
un importe global de 200 millones de pesetas.
3. Política de amortizaciones,
resultados y rentabilidad.
Las amortizaciones
han constituido, sin lugar a dudas, una de las principales fuentes de
financiación de las inversiones realizadas por la sociedad. Como puede
deducirse del cuadro número 3, éstas han seguido una marcha muy progresiva,
incrementándose a una tasa anual de 8,5 por 100, lo cual es relativamente
elevado si tenemos en cuenta la evolución del inmovilizado.
En la actualidad, la
sociedad tiene amortizado el 36,6 por 100 del inmovilizado, y de seguir éstas a
su ritmo actual tendría amortizado la totalidad del mismo en el plazo de 10,7
años. Dichas cifras son bastante favorables dentro del sector, sobre todo
teniendo en cuenta que han seguido una evolución francamente progresiva en los
últimos años, como puede deducirse del cuadro antes citado.
En cuanto a los
resultados de la empresa que recoge el cuadro numero 4, siguen una evolución muy
favorable en los últimos ejercicios, si bien es verda que se partía de niveles
francamente bajos en los primeros años del periodo. Los ingresos de explotación
aumentan a una tasa anual de 20,4 por 100, aunque los gastos inherentes a la
misma loa hacen en una cuantía comparable.
Las cargas financieras se mantienen
prácticamente estacionarias, a pesar del incremento en el pasivo exigible de la
empresa que comentamos en el apartado anterior. La explicación de este fenómeno
se encuentra en la progresiva sustitución de créditos bancarios a corto plazo
por otros pasivos de menor coste financiero, que comentamos, asimismo,
anteriormente. En cuanto al beneficio neto que registra un crecimiento
espectacular, debe tenerse en cuenta que en los primeros años de éste fue
negativo, lo que hace que al entrar la empresa en rentabilidad, la incidencia
sobre resultados se haga notar con mayor intensidad. E Cash-flow (beneficio
neto + amortizaciones) o conjunto de recursos generados por la empresa crece a
una tasa también considerable (2,5 por 100) aunque con mayor regularidad como
consecuencia de la política financiera de la empresa que ha tendido a dar en
todo momento primacía a la autofinanciación.
Las cifras de
rentabilidad de la empresa, que refleja el cuadro número 5, muestra al igual
que las de resultados, la orientación que en la evolución de la misma marcó el
ejercicio de 1969, en el que puede decirse que se situó en rentabilidad. En
este sentido, aunque las diferente relaciones se mantengan todavía a niveles
relativamente modestos, su evolución es claramente progresiva a lo largo de los
últimos ejercicios, haciendo presagiar que el cambio de tendencia que se inició
en 1969 no es puramente circunstancial. Ello adquiere particular relevancia si
tenemos en cuenta que en los dos últimos años la situación de la economía
española no ha sido muy halagüeña, en particular en lo que se refiere a la
inversión que, como es lógico, es el mayor condicionante de una empresa que
concentra su actividad en el sector de bienes de equipo.
4. Evolución bursátil.
Las acciones de
Babcock cotizan oficialmente en las bolsa de Bilbao, Madrid y Barcelona, sin
embargo es en Bilbao donde lo hacen con mayor frecuencia y, por tanto, donde
tienen mayor significación su cotización. La cotización se ha mantenido por
debajo de la par en los dos primeros años del periodo analizado, para
revalorizarse fuertemente en 1969, ano en el que alcanzó el máximo nivel del
periodo (134 por 100). Posteriormente, y a pesar de la favorable situación
económica de la empresa, se vio afectada por la crisis general del mercado de
valores, sufriendo una apreciable disminución, estancándose en el ultimo
ejercicio en torno al 80 por 100. En el año en curso ha registrado un alza
considerable, en gran medida como consecuencia de la euforia general que ha
caracterizado a la bolsa.
La rentabilidad por
dividendos es muy elevada en los últimos ejercicios (anteriormente y siguiendo
con la tónica de forzar la autofinanciación al máximo la empresa no había
repartido dividendos) y muestra claramente la mejoría en la siuación de la
empresa. En cuanto a la rentabilidad para el inversor que incluye tanto
dividendo como plusvalías ha seguido una evolución irregular, adaptanose a las
variaciones en la cotización, aunque su balance final es bastante positivo. El
P.E.R. o pesetas que paga el inversor en Bolsa por cada peseta de beneficio
obtenida por la empresa es reducido en los dos últimos ejercicios, aunque está
bastante en línea con las cifras normales del sector (el P.E.R. de 1969 no es
significativo dado lo reducido del beneficio en dicho ejercicio).
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Publicado en 1972 en la
revista CAMBIO16
Obra original
perteneciente a los fondos bibliográficos de la Fundación Sancho el Sabio
Fundazioa. (Vitoria-Gazteiz).
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