sábado, 4 de febrero de 2017

Altos Hornos de Vizcaya y la reconversión de la siderurgia integral (I).- 1982

Altos Hornos de Vizcaya y la reconversión de la siderurgia integral (I).- 1982

La fábrica del “El Carmen” en Baracaldo.
   A primeros de este mes de septiembre, la dirección de Altos Hornos de Vizcaya, daba a conocer su libro informe “Altos Hornos-Nueva era”, recogiendo los planes de la sociedad de aquí al año 2.000. La patronal de la más grande empresa de Euskadi, lanza así una alternativa distinta (contrapuesta, se podría decir mejor) a la del informe Kawasaki sobre las perspectivas de reconversión de la siderurgia española y pretende condicionar, de manera definitiva, la segunda fase de las medidas de saneamiento y reconversión pactadas en marzo del 81, por la administración, la patronal siderúrgica y los sindicatos UGT y CC.OO. 

   En marzo del 81 se aprobaba en referéndum por apenas un 50% de los trabajadores de la siderurgia del estado, un plan de reconversión industrial. El 8 de mayo aparecía un Real Decreto dando carácter legal a dichas medidas.

   El plan tenía dos fases: una primera de saneamiento de las empresas que componen el sector y una segunda de reconversión o reindustrialización. Sobre esta segunda fase, casi nada se establecía en los acuerdos ni en el Real Decreto, tan solo habrían de hacerse una serie de inversiones básicas (dos nuevas acerías que sustituyan a las actuales, coladas continuas, Tren de Bandas en Caliente para alimentar al de Bandas en Frio de Sagunto, instalaciones acabadoras) por un valor superior a los 130.000 millones de pesetas, y que su horizonte iría desde el año 80 hasta 1.990.


El “saneamiento” (1ª fase)

   La fase de saneamiento, que es la que está en marcha en la actualidad, tenía por objetivo realizar una serie de ajustes de tipo financiero y laboral. Las inversiones previstas, de carácter complementario, eran mínimas (19.691 millones). En lo financiero, se trataba de renegociar 139.000 millones de deuda existentes y captar 61.000 millones más de créditos para equilibrar lo que saldría; y en lo laboral, reducir las plantillas en 5.800 trabajadores mediante métodos “no traumáticos” (jubilaciones e incapacidad), moderar los salarios (9% de subida en el 81, el 70% del IPC en el 82) e imponer una amplia movilidad del personal.

Tren de Bandas en Caliente de Ansio.
El informe Kawasaki (2ª fase)

   Este polémico informe, dado a conocer en los primeros días de junio, establecía un plan de reconversión de la siderurgia integral, con un horizonte hasta 1.995. Si ha resultado tan polémico ha sido, exclusivamente, por la alternativa que presenta a la hora de realizar las inversiones en las distintas plantas siderúrgicas. Los directivos de cada una de las empresas y también las direcciones sindicales de CC.OO. y U.G.T. en cada una de ellas, se han desgañitado explicando las ventajas comparativas que tienen sus plantas para realizar tal o cual instalación frente a las demás (especialmente el Tren de Bandas en Caliente que se lo disputan Ensidesa o Altos Hornos del Mediterráneo).

   La inversión total que prevé Kawasaki es de 154.220 millones de pesetas. Dicha inversión se recuperará en un tiempo de 4 años y 5 meses, arrojando unas ventajas económicas de 368.150 millones de pesetas, con una tasa interna de rentabilidad de 32,21%. La plantilla de 41.00o trabajadores existente cuando se inició el estudio debería quedarse en 31.500 al final de 82 (supone casi 4.000 puestos más a reducir que los 5.800 pactados en marzo del 81) y en 28.621 en 1995 (es decir una disminución de casi el 30% de la mano de obra). La distribución de nuevas instalaciones comportan importantes diferencias por centros de trabajo, así, a la planta de La Felguera (Ensidesa), no se destina ninguna nueva inversión en tanto se paran la Batería de Cock, el Horno Alto y el Tren de Perfiles estructurales.

   En Sagunto se prevé crear una nueva planta (New Works) y en la que se hará la máxima inversión del plan, por valor de 65.210 millones de pesetas en un Tren de Bandas en Caliente, además, la vieja planta de Sagunto (Old Work) recibirá 6.220 millones para remodelar el convertidor existente y montar una nueva instalación de colada continua de slats. Al mismo tiempo se pararán el foso de colada de lingotes y el actual tren Blooming-slabbing.

   En Ensidesa-Avilés la reconversión será de 38.700 millones para remodelación de las acerías 1 y 2, la instalación de 2 nuevas coladas continuas en casa acería y una nueva línea de acabado TGL. Las instalaciones que quedan en desuso son muchas, los hornos Siemens-Martin, uno de los pozos de lingote y dos trenes estructurales.

La “nueva era” de Altos Hornos de Vizcaya

   El plan de reindustrialización previsto por Altos Hornos de Vizcaya, entra en franca contraposición con el informe Kawasaki en lo referente a: previsiones de mejoría de la demanda (Kawasaki es más pesimista, y estima que hasta 1.988 no se producirá un déficit de oferta de un millón de TM, momento que considera favorable para abordar las inversiones que crearán fuerte aumentos de producción, como el Tren de Bandas en Caliente) cantidad total a invertir y nuevas instalaciones que resultarán de dichas inversiones.

   Altos Hornos de Vizcaya con el objetivo de equilibrar su proceso productivo desea una siderúrgica integral completamente autosuficiente, pretende aumentar su capacidad de producción de acero, para lo que invertirá en una nueva acería, instalada sobre la actual LD en Sestao, y en la ampliación de la capacidad de producción del Tren de Bandas en Caliente de Ansio. Al mismo tiempo se instalaría tres colada continua de Slats pata mejorar los rendimientos del acero.

   Las instalaciones que quedaría paradas sería: el horno eléctrico, el horno devastador y los trenes de palanquilla y redondo.

   El coste de la inversión asciende a 42.143 millones de pesetas, casi dos veces y medio el previsto por Kawasaki para esta empresa.

   La pérdida de empleo estaría en torno al 20% sobre la plantilla ya sometida a la reestructuración del 81 los puestos de trabajo descenderían en 2.550 (1.500 corresponden a la reestructuración del 81) sobre una plantilla estimada para todos los centros de trabajo de Altos Hornos de 11.584 personas.

   Estas medidas son a juicio de la dirección de Altos Hornos de Vizcaya mucho más ventajosas que las propuestas por Kawasaki (acería nueva en Avilés y Tren de Bandas en Caliente en Sagunto), porque con una inversión mucho menor se obtiene rendimientos equivalentes e incluso mucho más elevados. Así como Altos Hornos de Vizcaya pasaría en 1.995 a fabricar 2,2 millones de Tm/año de acero (en 1.980 fueron 1,2 millones de TM) con un rendimiento Tm-hombre-año de 260 (frente a 156 en 1-980) y sin pérdidas (en 1.980 perdió 10.943 millones de pesetas y en 1.981 entre las tres siderurgias del estado alcanzaron los 41 mil millones.


* * * * *

Publicado por Iñaki Uribarri en 1982

En la revista Combate

Obra original perteneciente a los fondos bibliográficos de la Fundación Sancho el Sabio Fundazioa. (Vitoria-Gazteiz).

http://hdl.handle.net/10357/38873




No hay comentarios:

Publicar un comentario